domingo, 5 de febrero de 2012

Capítulo 19. En blanco

Ilustración de Ana María Ranieri

El profesor levantó la cabeza de sus probetas al oír el chirrido de la puerta y pudo ver a la joven dama de extrañas vestiduras que un día observó durante pocos segundos. En esta ocasión venía acompañada por Sebastián (la última vez que se encontraron, fue atropellado por él) y portaba un pesado libro. Sintió miedo y, cogiendo lo primero que tenía a mano, intentó protegerse:
—No sé qué han venido a buscar, pero les advierto de que soy un tipo peligroso —dijo blandiendo un triste embudo.
A Paula y Sebastián les costó que Víctor Tim creyera en sus buenas intenciones, pero lo realmente complicado llegó al intentar explicarle todo lo que había ocurrido desde la muerte de Bruno. Nadie mejor que el científico podía comprender el funcionamiento de los viajes en el tiempo, sin embargo desconocía mucho de lo sucedido. Disparos, parones temporales, malvados hombres sin pelo…
—Y ahora, según nos dijo el viejo, nosotros dos somos los nuevos guardianes —señaló Sebastián—. El problema es que no sabemos qué carajo significa.
Víctor Tim señaló, sin decir palabra alguna, el libro que les entregó Melquíades. La pareja comprendió que quería ver su interior. Lo abrieron por primera vez y descubrieron, con una punzada de desilusión, que todas sus páginas estaban en blanco, un blanco nuclear.

Durante los días siguientes, los tres dedicaron su tiempo y esfuerzo a encontrar una solución que revelara el contenido del libro (estaban seguros de que aquellas hojas escondían algo). Probaron con distintos productos químicos, aplicaron diferentes luces sobre el papel e incluso se pusieron gafas con todo tipo de lentes. Nada dio resultado.

Una mañana, Sebastián encontró a Paula llorando sobre el libro abierto. No le hizo falta preguntarle nada para saber de dónde procedía tanta desesperación. Si no descifraban el enigma, no podría salvar a Bruno. Él la abrazó y permanecieron en silencio durante un tiempo infinito.
—¡Gensanta! —gritó Víctor Tim al llegar al laboratorio.
Las letras habían empezado a surgir en aquellas páginas blancas desde el mismo momento en que Paula y Sebastián tocaron por accidente el libro al unísono. Ocurrió al abrazarse, cuando reposaron levemente sus cuerpos sobre el manuscrito. El contacto unido de los guardianes hacía visible la tinta.
Tan emocionados andaban con el nuevo hallazgo, que ninguno de los tres se fijó en las dos calvas que asomaban por la ventana.

Texto de Pablo Garcinuño

19 comentarios:

Laura dijo...

Felicidades a Pablo y Ana por hacer realidad el encuentro con Víctor Tim y envolvernos en la magia oculta que tienen los abrazos.

Un abrazo mágico que haga estas letras visibles.

Rocío Romero dijo...

Bueno, menos mal que alguien premia los abrazos... que estamos a falta :-)
Felicidades Pablo, por ese encuentro sin sobresaltos y por el contenido mágico y felicidades Ana, por los colores vibrantes y por una pareja preciosa.
Y besos

joseluis dijo...

Felicidades, Ana y Pablo por este mismo momento entre brazos, en un respiro sin tiempo, ¿semanas, meses?, tanto, que las calvados me sobresaltaron.

Los colores del momento me han gustado un montón :-)

Sara Lew dijo...

Maravilloso ese abrazo escrito y dibujado. El capítulo empieza "en blanco" cargado de espera e incógnitas, y termina con la riqueza de colores y la magia de la ilustración.
Enhorabuena a ambos.

Abrazos.

Unknown dijo...

Una semana más, felicidades a ambos por vuestro trabajo, por esos instantes de tiempo infinito y por un colorido tan espectacular.

Gala dijo...

Wow, lo que da de si un abrazo.
De sobras es sabido lo mágico que puede llegar a ser, pero en este caso además es absolutamente esclarecedor.
Fantástico el capítulo y la ilustración preciosa, cargada de colores, tantos como las posibilidades que se abren a partir de hoy.

Felicitaciones a ambos.

Rubén dijo...

Muy buen capítulo, ya van teniendo las piezas del puzle. La ilustración es muy colorida, como a mí me gusta. Felicitaciones!

Patricia K. Olivera dijo...

Que interesante, se está poniendo cada vez mejor!!
Upps, otra vez esas calvas por ahí???

Mis felicitaciones a ambos por el colorido y los abrazos!!

Saludos!!

Luisa Hurtado González dijo...

Me gusta mucho volver a encontrarme a Victor, una de los personajes que yo heredé y que me pareció muy tierno. Y no me extraña que se haya puesto a ayudar a la pareja, no esperaba menos de él.
El detalle del abrazo, es genial.
Y el fin de la relato con las dos calvas acechando...

En cuando a la ilustración, me gustan sus colores, tan alegres. Y, todo todo el tiempo desde que esto empezó, me encantan y sorprenden los ilustradores, tan diferentes y tan ricos.

Un beso, Luisa.

Elisa dijo...

Ana, una ilustración preciosa, ceñidísima al texto y a la ternura que destila.

Pablo Garcinuño dijo...

Gracias a todos los comentaristas por vuestras palabras. Y felicidades a Ana por su estupenda ilustración. Que siga avanzando la trama!

Gabriel Bevilaqua dijo...

¡Felicitaciones chicos! Muy bien.

Saludos

Anita Dinamita dijo...

Me ha gustado mucho el capítulo, tiene cierto reposo y mucha ternura, y el toque del abrazo... genial! cuántas cosas es imposible entenderlas sin una pizca de ternura...
Y lo de las calvas me parece curioso porque en el dibujo anterior por la ventana asoma algo que no se sabe muy bien si es la luna o una calva... aquí aparecen ambas, en la ventana y en el relato.
El dibujo me encanta, Ana, tiene toda la ternura que hacía falta.
Abrazos

Unknown dijo...

Puesto que soy la próxima narradora, tuve el privilegio de disfrutar unos días antes este capítulo que hace un pliegue, una bisagra en la trama.
Espléndido, Pablo!!!!

La ilustración de Ana María con sus exquisitos detalles, son un placer.

Felicidades a ambos

Elysa dijo...

Volvemos a ver a Victor Tim, me alegra, y además intentando ayudar a la pareja. Me gusta este episodio que destila ternura.

La ilustración llena de colorido y que acompaña perfecto al texto

Enhorabuena a ambos

Besitos

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Hay que agradecer que en este capítulo parece que por fin se junta algo para dejar de volvernos locos desparramando lineas y no saber por donde va a seguir la intriga. A ver por donde sale el siguiente autor.

Ana dijo...

Muchísimas gracias a todos por los comentarios. Feliz por ser partícipe de la novela y por la aceptación que tuvo este nuevo capítulo!
Pablo, felicitaciones a vos. Me encantó el curso que le diste a la historia, incorporando más elementos fantásticos, como el abrazo de los guardianes para hacer visible el libro. De una ternura increíble. Apenas lo leí supe lo que había que ilustrar, pero siempre temía no estar a la altura de tu texto.

Nuevamente gracias. Y, para ir a tono con el tema: un abrazo enorme para todos!!!

Adriana Alba dijo...

Felicitaciones Pablo y Ani, estupendo capítulo y hermosa pintura, la combinación perfecta.

Un fuerte abrazo y con tiempo lo leeré completo.

Besitos.

NiñoCactus dijo...

Me gusta la idea de que los abrazos y el cariño revelen el misterio... Quizás sirva también de arma contra los calvos.
Buen texto. Palabras e ilustración se tocan para descifrar todo el capítulo.
Abrazos de los mágicos